Me da igual que tus cambios repentinos de humor intenten apartarme de tu vera y me llenen de ira homicida habitualmente.
Algún día los superaré, les miraré a la cara y les escupiré bilis mientras cavo su tumba para que nunca más nos impidan ir al cine.
Ese día tendrás un hijo, un gato y un novio digno de un hijo y un gato.
Así que ve suprimiendo la última viñeta, porque esa gorda peluda, desaliñada, mal pintada, desordenada, cerda y malhumorada seré yo. Cambiando el Jack por un Betty y el cuadro del fondo por este dibujo que un día de júbilo infinito me regalaste y yo guardé, para recordar tiempos mejores.
Por mucho que detestes la idea de la felicidad, no me cansaré de buscarla para regalártela un 24 de mayo, un 6 de enero o un día cualquiera.
SI, puedo ser cursi y repugnante, solo es ponerse.
La bendita madre que te parió xD
ResponderEliminarEvidentemente que no voy a ser una gorda desaliñada, y muchísimo menos mal pintada.
Ya soy una cerda malhumorada, pero de eso hasta disfruto.
Y tú tampoco serás esa cerda.Probablemente lo sea alguno de nuestros amigos.Nuestros otros amigos que jamás leerán esto.
Lo que quiero decir es que no tengo trece tetas, ni he llegado a tener un gato al que poder matar, ni me excitan las ancianas (al menos no todas)
Lo que sí tengo es una deficiencia psíquica y por eso hago esos comics, pero no hay nada de lo que preocuparse.
Y al margen de todo esto te quiero, pequeño prostíbulo bícefalo tuberculoso e infecto :*